05 mayo 2004

Desavenencias

Apenas me ha dejado dormir.

Me ha revuelto las sabanas de tal manera que me he despertado enredado en ellas.

Me ha desordenado los armarios.

Me ha dejado la nevera vacía y no he podido desayunar.

Lo peor es su cara de circunstancias. Una cara que dice "a mi no me preguntes".

La he visto en el espejo y me ha desarmado.

No sé que hacer, creo que voy a tener que hablar seriamente con él.

0 comentarios: