29 octubre 2004

Misión Improbable

Mi objetivo para los tres próximos días es que sus respectivos amaneceres me pillen en la cama.

28 octubre 2004

Orificio

Esta mañana, mientras dormitaba en el tren, me he observado que en el cielo encapotado faltaba un trozo.
Una perfecta circunferencia de un azul insultante rodeada de gris plomizo.
Como cuando alguien, haciendo galletas caseras, utiliza el borde de un vaso para cortar circunferencias de masa.

No pegaba con el resto. Y no era normal.

A nadie ha parecido importarle.

26 octubre 2004

No hay derecho

Una propietaria de tienda de modas protestaba ayer en la televisión. El frío ha tardado en aparecer y por estas fechas ha vendido muchas menos prendas de abrigo de las esperadas.
"Es que tendría que hacer el tiempo que tiene que hacer".

Absolutamente de acuerdo. Si nadie toma medidas, voy a tomar el testigo y llevar su cruzada más lejos.
Ya pueden temblar el efecto invernadero, el movimiento de las placas continentales, la fotosíntesis y las leyes de la termodinámica. La aurora boreal, el anticiclón de las Azores, las órbitas de los planetas y la altura de las mareas. La aceleración de la gravedad, el efecto de rozamiento con el aire y las innumerables fuerzas contrapuestas de la física newtoniana.

Como alguno de ellos me dificulte un pelo mi vida voy a poner mi grito en el cielo, mucho más alto que todos los demás.

A ver si se enteran, que uno intenta trabajar. No hay derecho.

25 octubre 2004

Final abierto

Andrade era uno de los pocos empleados del edificio que utilizaba el cuarto de la fotocopiadora para fotocopiar documentos.

Este cuarto solía ser el refugio de emergencia para el cada vez menor clan de fumadores clandestinos de la empresa. También era el lugar de encuentro para los ocasionales y fogosos encuentros entre Luisa Vera, de recursos humanos y Blasco (el de contabilidad). Sexo iluminado con neón. Olor a papel y a tóner de impresora.

Esa mañana Andrade estaba tan atareado y ausente como siempre.
Era una de estas personas a las que puedes saludar al cruzartela por el pasillo y olvidarte de que la has visto veinte segundos después. Nunca estuvo muy claro si esto era un don del cual hacía uso de forma continuada, o una maldición que lo perseguiría hasta el fin de sus días.
Nadie pensaba demasiado tiempo seguido en Andrade. Ni siquiera el propio Andrade.

Todo esto cambió el dia que, metido en el cuarto de fotocopiadoras, respirando la atmosfera cargada de gris espeso, y bañado por el parpadeo epiléptico de los tubos de neón, Andrade se volvió loco.
...

(Historia inconclusa. Stop. Ruego a mis lectores hagan el trabajo sucio y la terminen. Stop. Gratificaré con paquete de pipas, bolsa de gominolas o similar. Stop)

22 octubre 2004

Binario

Para qué preguntarme, si no voy a saber responderme.

Quizas hubo un tiempo en que me deslizaba en trineo en laderas de gris claro. O gris oscuro. El punto medio entre dos puntos era mi lugar habitual de residencia. Me habitué a ese exhilio de todo y hasta le cogí el gusto.
Ultimamente alterno el blanco y el negro más puros y afilados . Como de teclas de piano.
El trineo ya no vale. Hay que caminar.
Me podrán encontrar ustedes sentado en alguno de los dos lados, con las piernas colgando.
Esperando el cambio, o deseando que no llegue.
No tiene sentido perder el tiempo haciendo predicciones.

Destructora

La considerabamos un capricho innecesario cuando llegó, pero ahora nos hemos enamorado de ella.
Y la usamos con cualquier excusa.

Estamos enganchados al sonido de la destructora de documentos.
Al sencillo espectáculo de una hoja llena de texto transformada en detrito por arte de magia
Al sinuoso baile de las cintas de papel posandose en el fondo de la cubeta. Palabras seccionadas que ya nunca volverán a juntarse.
Algún día, con tiempo y pegamento de barra, reordenaré las cintas y crearé poemas extraños con ellas.

Es más fácil destruir que crear. Y supongo que en ocasiones también es más divertido.

20 octubre 2004

Orla

Fotograma teñido de sepia en orlas ajadas. Salas de estar con papel pintado y mesas camilla.
En su cara absorta, la misma mirada perdida y oblicua que la de sus otros compañeros de promoción perseguía un punto imaginario. El mismo que todos los demás.
Arriba, a la izquierda. Sonría. Quieto. Ya.

Nunca tuvo claro si lo malo era querer quedar primero o envidiar al que lo hacía.
Nunca fue competitivo.
Su nombre habitó en el grueso de listas sin final, respirando anonimáto. Subsistiendo a base de él.
Sólo tuvo algo distinto: coleccionaba palabras alérgicas al polvo.
Las calló para no perderlas. Nadie las escuchó nunca.

15 octubre 2004

Multipropiedad

En ocasiones mi cuerpo se rebela.
Asumo mi papel y sé de sobra que resido en régimen de multipropiedad. Otros "yo" lo habitan silencionsamente en pisos inferiores. Y en ocasiones, se manifiestan o me dan unos golpes en el tabique. Quejas acerca del uso (o del abuso) que le doy.
Ante una semana de tensión laboral, madrugones, un concierto inminente, ensayos a todas horas, los trenes que siempre estoy a punto de perder, la llegada de un juguete deseado venido de muy lejos y el cumpleaños de una amiga siempre desatendida, mi cuerpo se planta y me gira 90º grados el estómago. Y ya acostumbrado a la digestión perpendicular, me encuentro con una erupción en el labio, una guinda en el pastel apresurado que ultimamente parezco ser.

Necesito que nos reconciliemos. Necesito tiempo.

13 octubre 2004

Asueto

Sol blanco, viento a ras de arena. Y un perro que ladra lejos.
La gente escogió otro sitio para estar.
Olvidé que tenía cuerpo, y ahora el sol me lo devuelve.
Respiro lento, tumbado. Si entorno los párpados lo suficiente, apenas dos o tres rayos de luz me dibujan formas extrañas en las retinas.
Circulos de luz, cordones de puntos. Galaxias diminutas que nadie más ve ahora.
Hoy todo es fácil, hoy sobra tiempo. Ahora mis pies piden agua.
Me voy de paseo, buscar conchas. A mirar olas.

08 octubre 2004

Test Cosmopolitan

Tus padres entran a traición a tu casa para limpiarla cuando tú no estás. Llegas del trabajo y los sorprendes in fraganti...

a) Eres un guarro ocupado: nunca tienes tiempo y ganas para limpiar.
b) Eres un guarro orgulloso: eres muy reticente a pedir ayuda en temas domésticos.
c) Eres un guarro a secas. Menos monsergas. Eso sí, tienes un talento inaudito para evitar admitirlo y buscar explicaciones alternativas.
d) Evidentemente tus padres padecen un caso grave de obsesión colectiva por la limpieza que, añadido a un síndrome de nido vacío en estado avanzado, les lleva a infiltrarse en las viviendas de su prole para dejarlas como una patena sin que ellos lo adviertan. Lo tuyo es normal.

Tacharía la "d", pero no tengo boli, y desde que me han ordenado la casa y todo está en su sitio, no encuentro nada de nada.

07 octubre 2004

Centrifugado

De tan cansado que estaba hoy me puse a dar saltos.
Y liberé un grito mudo encerrado en el aseo.
Y ahora mi lavadora también grita y salta, tal vez muerta de envidia.
Lo suyo es exceso de carga.

Debe ser muy sencillo vivir sabiendo la sencuencia correcta de los acontecimientos.
Cuando es el momento y el ritmo al que hacer girar las cosas.
Programa corto. Tejidos resistentes muy sucios. Centrifugado.
Fin del programa: mi lavadora descansa.
Yo haría lo mismo, pero me toca tender.
Tal vez muerto de envidia.
Lo suyo es exceso de carga.
Quizás lo mio también.