10 diciembre 2004

Central de correos

No creo que lo recuerde mañana, no puedo confiar en mi memoria.
Pero sí puedo confiar en la incompetencia del servicio postal.
Me enviaré a mi mismo un paquete con todas las respuestas, y espero que tarde en llegarme cientos de años.
Y entonces lo sabré todo.
Que el Halcón Maltés no era tan negro. Que la chica no era realmente tan mala, ni Bogart era tan listo como él mismo se creía.

Que todo es distinto una vez rascas el esmalte que lo cubre.

0 comentarios: